Conflicto socioambiental por Tranque de Relaves “El Torito”, Mina El Soldado
Ubicación:
- Provincia: Quillota
- Comuna: Nogales
- Localidad: El Melón
Hito de inicio: Resolución de Calificación Ambiental favorable en 2004 para ampliación de tranque
Temporalidad de la afectación: En proceso
Principales organizaciones involucradas:
- De derecho: APR El Melón, ONG Poyewn
- De hecho: Agrupación Ambientalista El Melón, Agrupación Wayacanes Cultura Reverde, Movimiento Popular Pozo 9
Sector/Actividad Económico (a): Minería
Causa específica de afectación: Ampliación de tranque de relave de residuos mineros
Instrumentos de ordenamiento territorial de relevancia:
- Plan Regulador Comunal de Nogales
Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental:
- Consulta de pertinencia: No
- Declaración (DIA)/ Estudio de Impacto Ambiental (EIA): Sí (EIA)
Zona de Escasez Hídrica (sí/no): No
Judicialización(sí/no): No
Especies en riesgo por la causa de afectación:
Vegetales:
- Belloto del Norte (Beilschmiedia miersii). Vulnerable. Monumento Natural
- Guayacán (Porlieria chilensis) Vulnerable
- Naranjillo (Citronella mucronata). Vulnerable
Animales:
- Yaca (Thylamys elegans). Preocupación menor
Resumen
El tranque de relaves “El Torito”, infraestructura destinada a la depositación de material estéril resultante de la explotación de la Mina “El Soldado”, ubicada en la localidad de El Melón, comuna de Nogales, comenzó a estar operativo en el año 1993, luego de que la mina recibiera la autorización de explotación a rajo abierto por parte de Sernageomin en 1989. La mina pertenecía a la Compañía Minera Disputada de Las Condes, pero en el año 2002 pasó a ser propiedad de la transnacional AngloAmerican Sur S.A. El tranque de relaves “El Torito”, carga con antecedentes de grave peligrosidad, ya que, a causa del terremoto del 28 de marzo de 1965 (7,6 grados Richter, con epicentro en La Ligua), se generó un grave derrumbe de relaves, a causa del colapso de dos previos tranques de relaves situados en la zona; El Cobre Tranque Viejo y El Cobre Tranque Nuevo, en la comuna de Nogales. Este derrumbe sepultó casas, animales y vegetación del pueblo “El Cobre” registrándose al menos 200 muertos según medios de la época.
Con fecha 14 de noviembre de 2003, el titular presentó un Estudio de Impacto Ambiental[i] para el proyecto de ampliación del tranque, considerando aumentar el almacenamiento de relave de 76 Mt a 181 Mt, construyendo la extensión sobre una superficie de 77 ha. El Estudio recibió diversas observaciones por parte de la comunidad local y, sin embargo, con fecha 16 de agosto de 2004, obtuvo la aprobación ambiental RCA) mediante Resolución Exenta Nº163. En el marco de la tramitación ambiental del proyecto de ampliación, uno de los actos más graves fue la promulgación del Decreto Exento N°525, mediante el cual el Ministerio de Agricultura desafectó la protección legal de especies protegidas, permitiendo la eliminación o corta de ejemplares forestales catalogados como Monumento Natural. En el contexto de este Decreto, la ampliación se resolvió dado que el área afectada contenía poblaciones de Belloto del Norte (Beilschmiedia miersii), donde se definió un programa de traslado con plan de manejo aprobado por Conaf de 62 individuos localizados en el área de influencia directa del tranque.
La Resolución favorable despertó resistencia en vecinos y vecinas y se interpuso un recurso de reclamación (Rol 82/04) ante la Comisión Nacional de Medio Ambiente (Conama, hoy Ministerio sectorial), destacando la afectación a ecosistema único en la zona inundada por el tranque, los impactos socioeconómicos y la devaluación de parcelas colindantes con el terreno del tranque. El recurso fue rechazado con fecha 4 de agosto de 2005 (Res.Ex. Nº 174/05). Con el Decreto N°525 ya derogado en diciembre de 2004, se abrió proceso sancionatorio hacia el titular debido a tala de individuos de Belloto del Norte, con fecha 17 de julio de 2008.
Posteriormente, si bien no fue por motivo de obras específicas al tranque de relaves, se volvería a modificar transitoriamente la protección del Belloto del Norte como Monumento Natural, mediante el Decreto Exento N°654/2009 del Minagri, el cual habilitó a la Conaf para autorizar la “intervención o alteración” del hábitat de especies forestales declaradas Monumento Natural. En virtud de este Decreto (entre otras normativas involucradas), se aprobó el proyecto “Continuidad Operativa Sustentable Mina El Soldado”, cuya ejecución implicaba la eliminación de 417 individuos de Belloto del Norte (Beilschmiedia miersii), 1.367 individuos de Guayacán (Porlieria chilensis) y 160 individuos de Naranjillo (Citronella mucronata). En invierno de 2011, el Decreto N°654 fue derogado, lo que da a entender, que al igual que en el caso anterior (Decreto N°525), se trató de modificaciones transitorias a favor de intereses mineros.
En 2013, frente a denuncias ciudadanas por posible colapso debido a fisuras y grietas en el tranque de relave, Sernageomin fiscalizó en 2014, constatando seis fallas respecto a la construcción del muro de contención del tranque y a las arenas de contención, por lo que se recurrió a infracciones graves y gravísimas y al levantamiento de medidas correctivas.
Esta situación contrasta con el hecho de que, con fecha 8 de enero de 2018, el SEA admitió un nuevo Estudio de Impacto Ambiental para el proyecto que le da continuidad operativa al Tranque de Relaves, aumentando en un 30% la capacidad de disposición de relaves autorizada. Esta segunda ampliación permite recibir 54 Mt adicionales de relaves, instalando una capacidad máxima total de 235 Mt para el año 2027. Durante la evaluación del estudio, en las oportunidades de participación ciudadana, la comunidad manifestó sus inquietudes por la seguridad del tranque de relaves y la contaminación del agua para consumo humano, riego y bebida animal, además del daño al bosque nativo presente en el sector y la intervención en la Cordillera El Melón, declarada Sitio Prioritario para la Conservación de la Biodiversidad. No obstante, el estudio recibió su calificación ambiental favorable mediante resolución exenta Nº2 por parte del Servicio de Evaluación Ambiental.
Esta resolución fue objeto de indignación por parte de vecinos y vecinas, los cuales presentaron en total 44 recursos de reclamación ante el Comité de ministros, destacando entre los antecedentes presentados que las observaciones realizadas durante el proceso de Participación Ambiental Ciudadana no fueron ponderadas, que no se consideraron las emisiones de material particulado y que no se considera la eventual afectación a la cantidad, calidad y disponibilidad del recurso hídrico. Los recursos de reclamación fueron rechazados en su conjunto por parte del Comité de Ministros por medio de la resolución exenta N°202299101146-22.
Cabe destacar que en medio de la tramitación ambiental de la segunda ampliación del tranque, vecinos y vecinas decidieron tomarse uno de los pozos de Anglo American a fines del año 2019, en reacción a la grave situación de escasez hídrica en la comuna. La toma del pozo permitió denunciar, por un lado, la responsabilidad de la mina respecto a la captación de agua, siendo muy superior a la que recibe la APR de El Melón (40 l/s versus 1.8 l/s) y, por otro, lograron que la minera desviara agua del pozo tomado hacia la reserva municipal.